Vasilíu, hojas sueltas es una novela inspirada en la realidad de los hospitales psiquiátricos. El destino de los enfermos, y en particular el de una especie de rey de los locos, Laban, se cruza con el de un psiquiatra, el Dr. Vasilíu, científico paranoico, poeta esnob y marxista. Alrededor de ellos gravita un mundo tornasolado de enfermos, de empleados de hospital y policías, que tejen una serie de intrigas amorosas y policiacas obscenas y cómicas. Vasilíu, hojas sueltas es una sátira cruel, y llena de fantasía, del asilo psiquiátrico, condenado por la historia, como las estructuras sociales que lo han engendrado.
Ion Vianu, médico psiquiatra, debido a su enfrentamiento con el poder totalitario ceausista ante la degradante utilización de la psiquiatría como castigo político, emigra en 1977 a Suiza. A partir de 1990 es una de las voces más lúcidas de la Rumanía post-comunista totalitaria. Su vena de prosista resalta en su análisis de la actualidad y en libros de ensayos, memorias y novelas. La inquietante novela Vasilíu, hojas sueltas, cuya acción transcurre en un hospital psiquiátrico en vísperas de la caída del régimen de 1989, es parte integrante de la trilogía El archivo de la Traición y de la Ira.
«He leído este libro con una intensa participación y admiración. Extremadamente poderoso y expresivo, es difícil escapar al universo morboso, trágico-grotesco del hospital, metáfora de la Rumanía de aquellos tiempos cruentos. El ambiente patológico produce personajes alucinantes que se agitan, sufrientes y crueles, en la putrefacta realidad cotidiana. Los retratos de algunas víctimas llegadas al borde de la demencia debido al terror totalitario comunista así como los de varios exponentes del poder de aquellos tiempos, resulta memorable por la energía de lo maléfico inteligente, prolífico, turbador. La imagen de conjunto de la colonia penitenciaria ceausista es de una originalidad portentosa, algo como una actualización de la magia negra convertida en farsa popular». Norman Manea
«La novela es no sólo una extraordinaria metáfora de una sociedad enferma sino también una reflexión sobre nuestras nociones en torno a la locura. Enérgica y satírica y, al mismo tiempo, de una gran generosidad humana, Vasilíu, hojas sueltas es una gran novela europea del siglo». Matei Calinescu
(www.aletheiaeditorial.com)
(los textos completos, en documentos adjuntos)
PRESENTACIÓN DE "VASILÍU, HOJAS SUELTAS" de Ion Vianu
Intervención: Gustavo Dessal
"No existe historia pura. Queda solo el relato. El relato, cuando se fundamenta en un
instinto seguro y en el conocimiento de la vida, tiene más valor que una historia perdida en el
transcurrir del tiempo que la generó". Así reflexiona la voz narrativa de esta novela, un hombre que
decide descubrir la verdad sobre su padre, un grave enfermo mental recluido durante décadas en un
hospital psiquiátrico provincial de Rumanía. ¿Cómo se puede contar la historia, en este caso un
considerable capítulo de la historia de un pueblo, si no es a través de la "impureza" de la literatura?
Es probable que sobre la catástrofe histórica del comunismo se hayan escrito miles de páginas, y
otras tantas que habrán de escribirse. Todo ello conformará una gigantesca memoria, guardada en
los archivos de las naciones que padecieron directamente esa tragedia, y también en los de aquellas
que se vieron de alguna u otra forma implicadas. Pero será sin duda la literatura, como lo ha sido y
lo sigue siendo en el caso del nazismo, quien mejor pueda dar cuenta mediante la ficción de los
momentos más oscuros de la humanidad, puesto que solo a través del drama de una vida es como
podemos identificarnos con el sufrimiento de todo un pueblo. (...)"
Intervención: José Vidal Otero
"Vladimir Vasilíu, director del hospital psiquiátrico de Rastoaca Melcilor, ante la
evidencia de la vejez y de la muerte, hace lo que llama una confesión de lo que ha sido
su vida, ante alguien que le escucha, el narrador, Dan Naidin, quien en realidad no ha
venido a escucharle por este motivo, sino porque se halla inmerso en una investigación
personal sobre la identidad de su propio padre. A través de la confesión, así como de las
aportaciones del narrador, van surgiendo historias diversas y sorprendentes de
personajes diversos y sorprendentes.
Porque esta es una narración de historias particulares, de personajes. Personajes, no sólo
en el sentido literario, como caracteres, muy bien definidos por cierto, sino en el sentido
más extraliterario y vulgar del término: "personajes", es decir individualidades que
hacen su vida como pueden, mirándose frecuentemente como una especie de héroes de
sí mismos, ante un mundo que viven como hostil, y al que en cierta forma desprecian.
Los personajes son los protagonistas de lo que conocemos como picaresca, sea esta
literaria o no, y pueden ser de cualquier condición social, llegando incluso a conseguir
cierto reconocimiento en altas esferas políticas o económicas: estos son los verdaderos
pícaros."