El 23 de junio de 2011, se cumplen 130 años desde cuando se establecieron las relaciones diplomáticas entre Rumanía y España. En aquel día del año 1881, el Gobierno español solicita a las autoridades de Bucarest el beneplácito para establecer una representación permanente en Bucarest. Una vez recibido el consentimiento del Gobierno rumano, poco tiempo después de la proclamación del Reino de Rumanía, se constituye la Legación del Reino de España en Bucarest, dirigida por Juan Pedro de Aladro, encargado de negocios.
En los archivos del Ministerio de Asuntos Exteriores de Bucarest aún se conserva la carta a través de la cual el diplomático español era acreditado en Bucarest, carta dirigida por
Antonio Aguilar y Correa, Marques de la Vega de Armijo, el ministro español de exteriores de la época, a su homólogo rumano, Eugeniu Stătescu (uno de los signatarios del acto de la proclamación del Reino de Rumanía en 1881).
Tenemos el placer de presentarles en copia esta carta que oficializa el establecimiento de relaciones diplomáticas entre España y Rumanía.
Rumanía no pudo contestar al gesto de España con abrir una legación sino unas tres décadas más tarde, en 1913. Desde el 15 de junio de 1913, empieza a funcionar la Legación Rumana en Madrid, encabezada por George Cretzianu, en calidad en enviado extraordinario y ministro plenipotenciario de Rumanía.
Aún así, desde 1885 han empezado a crearse en España consulados de Rumanía, primero los honoríficos (el primero funcionó en Barcelona, dirigido por Antonio Borell y Falch, banquero y diputado; después de diez años, el 8 de junio del 1895 el consulado honorifico era ascendido a rango de consulado general). Siguió la creación de nuevos consulados en Cádiz (1890) y Valencia (1913), ambos honorarios. Tras la Primera Guerra Mundial, se crearán consulados honorarios de Rumanía en Bilbao, Cartagena, Las Palmas, Málaga y San Sebastián, en Madrid creándose el segundo consulado general (después del de Barcelona).
Sólo apenas 100 años más tarde, las misiones diplomáticas en España han vuelto a alcanzar un número cercano al que se había alcanzado después de la primera guerra mundial, a parte de la Embajada en Madrid, funcionan los consulados generales en Barcelona, Sevilla y Bilbao, los consulados en Castellón, Zaragoza, Ciudad Real y Almería, y los consulados honorarios en Murcia y Pamplona.
En el primer siglo de relaciones diplomáticas bilaterales se han debido que superar dificultades generadas por la distancia geográfica, la sucesión de guerras que han afectado Europa y las incompatibilidades de orden político entre el régimen franquista de España y el régimen comunista de Rumania.
Después de la creación de la Legación de Rumanía, las relaciones bilaterales no han evolucionado de manera linear, habiendo tanto sincopes, como momentos importantes en la historia de la diplomacia de los dos estados. En 130 años desde el establecimiento de las relaciones diplomáticas hemos asistido a:
- la cancelación temporaria de la Legación de Rumanía (por razones financiarías, el 9 de marzo de 1922), seguida por su re-apertura unos años más tarde,
- la destrucción parcial de la nueva sede de la Legación durante las luchas del período de la Guerra Civil española, por su proximidad con un cuartel en Madrid y su traslado en otro espacio,
- la cesión del asilo a varios cientos de ciudadanos españoles, refugiados en los edificios de la Legación de Rumanía, debido a la inseguridad generada por la Guerra Civil (entre los refugiados se han encontrado también familiares de algunos diplomáticos españoles, así como un sobrino del Rey Alfonso XIII),
- la rotura de las relaciones diplomáticas el 4 de abril 1946; a partir de este momento tanto España como Rumanía han reconocido los gobiernos en exilio, en Madrid había una Legación Real de Rumanía y en Bucarest una Legación de la República Española,
- el cese de facto de las relaciones de Rumanía con el gobierno republicano español en 1951,
- el restablecimiento de las relaciones consulares y comerciales el 5 de enero de 1967,
- el restablecimiento de relaciones diplomáticas el 21 de enero de 1977.
Más allá de las relaciones entre las autoridades de los dos estados, el interés de la sociedad civil de los dos países para desarrollar formas de cooperación específicas ha surgido con relativa rapidez. En este sentido, el 31 de mayo 1930 por una iniciativa de Alexandru Tzigara-Samurcaş, se constituyó en Barcelona la Asociación "Amigos de Rumanía", formada por personalidades españolas de la cultura y economía y teniendo como Presidente Protector al Duque de Alba (Ministro de Estado) y como presidente de honor al embajador rumano, el Príncipe Antón Bibescu.
A partir del 1990 empieza un período de fortalecimiento de los lazos, en el cual el crecimiento paulatino del numero de rumanos en España, hasta situarse como primera comunidad extranjera en España, el valioso apoyo de España al ingreso de Rumanía a la Unión Europea y a la OTAN, cooperar con los socios dentro de la UE y en el marco de las operaciones militares, colaborar en formatos multilaterales o los intercambios en el ámbito económico y cultural representan en primer lugar el marco de acción de los diplomáticos de ambos estados.
Del largo listado de visitas reciprocas, tanto a Bucarest - el Rey Juan Carlos y la Reina Sofía en 1985 y en 2003 – como a Madrid - el Presidente de Rumanía, Traian Băsescu, en noviembre 2007.
Los dos estados han firmado el 4 de febrero 1992 el Tratado de amistad y cooperación, entrado en vigor el 10 de julio 1993. Dicho Tratado ha sido acompañado por una serie de convenios técnicos en el ámbito económico, laboral, de la protección social, de la protección de los menores, del interior y cultural. Se destaca la declaración común de los ministros de educación, de julio 2007, sobre la base de la cual se ha introducido la enseñanza del rumano en centros educativos de España.
Los momentos clave de la historia reciente de las relaciones bilaterales fueron la firma del decreto para el establecimiento del Consulado General de Rumanía a Barcelona, el 10 de octubre de 1995, seguida por la firma del decreto de establecimiento del Consulado de Rumanía a Castellón, el 27 de octubre 2006, la firma del decreto para establecer el Consulado General de Rumanía a Sevilla, el 29 de octubre 2006, la firma de los decretos para establecer el Consulado General de Rumanía a Bilbao y del Consulado de Rumanía a Ciudad Real, el 23 de julio 2007, la firma del decreto para establecer el Consulado de Rumanía a Zaragoza, el 16 de julio 2008 y del Viceconsulado de Rumanía a Almería, el 17 de noviembre 2008. Asimismo, desde diciembre 2006 funciona en Madrid el Instituto Cultural Rumano, después de más de 10 años de actividad del Centro del Instituto Cervantes de Bucarest.
Scrisoarea care oficializă stabilirea relaţiilor diplomatice între Spania şi România